(Cundinamarca, julio 1 de 2025). En respuesta al sismo ocurrido el pasado 8 de junio en el municipio de Paratebueno, la Gobernación de Cundinamarca continúa avanzando en una labor clave para la atención a la población damnificada: la identificación predial y social de las zonas más afectadas.
La estrategia, que articula el trabajo de la Secretaría de Vivienda, liderada por Lino Roberto Pombo Torres, y la Agencia Catastral de Cundinamarca, dirigida por William Eduardo Rozo, tiene como objetivo generar información precisa para orientar las intervenciones institucionales.
Las acciones se desarrollan en coordinación con autoridades locales, líderes comunitarios, inspecciones de policía y entidades presentes en el territorio. La labor técnica y social se ha concentrado en los centros poblados Santa Cecilia y Japón, priorizados por el nivel de afectación estructural y social registrado tras el sismo.
Santa Cecilia, primer avance completo
El centro poblado Santa Cecilia se convirtió en el primer sector con información completamente actualizada. Se identificaron todos los predios desde el punto de vista físico, jurídico y social en la zona A, la zona C y el área central. Actualmente, la intervención continúa en la zona B, con lo cual se completará la cobertura total.
“Hemos levantado información física, jurídica, económica y social de los predios afectados, gracias a un equipo de profesionales altamente capacitados y comprometidos con el territorio. Se realizaron censos en hogares y mediciones físicas de los terrenos”, explicó Alexandra Martínez, líder del componente social de la Agencia Catastral de Cundinamarca.
Japón y Medina, las siguientes etapas
En paralelo, se ha iniciado el acercamiento social en el centro poblado Japón, mientras se alista el despliegue técnico para su reconocimiento físico. Posteriormente, el proceso continuará en el municipio de Medina, lo que marcará el cierre de esta fase de intervención territorial.
Este trabajo conjunto permitirá a la Gobernación definir con mayor precisión las soluciones habitacionales y de acompañamiento para las familias afectadas, garantizando una respuesta institucional coordinada, fundamentada en información confiable y centrada en el bienestar de las comunidades.