(Cundinamarca, septiembre 22 de 2025). La Gobernación, a través de la Unidad Administrativa Especial para la Gestión del Riesgo de Desastres (UAEGRD), reiteró su llamado urgente al Gobierno Nacional, la ANI, el Invías y la concesión Coviandina para que definan e inicien cuanto antes un plan de ingeniería que detenga el movimiento de la ladera en el kilómetro 18+600 de la vía Bogotá–Villavicencio, en el municipio de Chipaque.
El director de la UAEGRD, William Rozo, explicó que el deslizamiento sigue activo por la saturación del terreno causada por aguas superficiales y filtraciones subterráneas, lo que ha impedido la remoción total del material y mantiene en riesgo a la comunidad de la vereda Caraza.
“Han pasado más de 15 días desde el inicio de la emergencia y aún no se ha definido un manejo integral de las aguas en la parte alta. Exigimos estudios y obras que estabilicen la ladera y devuelvan la seguridad a este corredor estratégico para el país”, señaló Rozo.
Acciones en territorio
La administración departamental, junto con la Alcaldía de Chipaque, ha entregado ayudas humanitarias a las familias afectadas, otorgado subsidio de arrendamiento a tres hogares evacuados y realiza monitoreo permanente a ocho viviendas más que podrían verse comprometidas.
También se ha garantizado el suministro de agua mediante carrotanques y se han hecho intervenciones hidráulicas en la quebrada Munar y el río Une para evitar represamientos.
Adicionalmente, se evalúa apoyo económico y logístico para los productores agropecuarios de la región que han visto afectado el transporte de sus cosechas y animales por el cierre prolongado de la vía.
Llamado a soluciones de fondo
El gobierno departamental advirtió que las soluciones temporales no son suficientes para una vía que es clave para el abastecimiento de alimentos y el desarrollo económico de Colombia.
“Este no es solo un asunto de movilidad. Está en juego la vida de las comunidades, la seguridad de la infraestructura y el abastecimiento del país. La vía al Llano no puede depender de intervenciones paliativas cada vez que llueve”, concluyó el director de la UAEGRD.